manteca extraída del aceite de las semillas del árbol Butryospermums paradoxum. Excelente producto para el cuidado de la piel. Hidrata, protege y mantiene la elasticidad de la piel.
La Manteca de Karité ha sido utilizada durante miles de años para curar enfermedades de la piel y el cuero cabelludo, así como para mitigar decoloraciones de la piel, cicatrices y arrugas. También se ha usado como relajante muscular, como analgésico para hinchazones y artritis y como filtro solar. Para aplicarla, sólo es necesario derretirla en el hueco de la mano antes de su utilización.
Los ácidos grasos de la Manteca de Karité son indispensables para hidratar y retener la elasticidad de la piel. Al reconstruir la falta de grasa de las células epidérmicas, la Manteca de Karité da a la piel todos los elementos necesarios para mantener su equilibrio.
Hoy también sabemos que la Manteca de Karité aumenta la circulación capilar que, a su vez, incrementa la oxigenación del tejido mejorando la eliminación de residuos tóxicos metabólicos.
MODO DE EMPLEO:
Derretir con la palma de la mano antes de su aplicación.